Un plan perfecto para una noche de verano en Madrid, pues uno de sus mayores encantos es el jardín…Imprescindible reservar en verano, en invierno cenas dentro y pierde mucho.
Accedes a la zona de mesas por un caminito de piedras, rodeado por vegetación y con el único sonido del agua de la fuente central, todo iluminado con unas lámparas gigantes de diseño que desprenden luz en toda su forma, te recomiendo que cuando reserves mesa pidas una del lateral, pegada al césped, así estarás más fresquito, sin embargo, si eres friolera, pide las mesas más cercanas al edificio, que están más resguardadas.
La carta no es muy extensa, pero eso ayuda a escoger y lo mejor es que tienen varios menús, me encantaron sus denominaciones; Chic, Cool, Vintage y Trendy, con un precio medio de 50€.
Fuera de carta; el tartar de atún, riquísimo aunque un poco escaso, muy especial la combinación de sabores del entrante de foie con tomates asados y muy rico el postre de batido de yogurt con frutas.
En general, cocina vasca creativa
Además, también hay un BOKADO en el Aquarium de Zaragoza, con muy buena pinta y en el del Museo del Traje encontrarás un sitio perfecto para cocktails de empresa o eventos particulares